Desde hace unos 4 meses que en mi viaje al trabajo me encuentro con un ejemplo de lo que es la descoordinación entre las distintas instituciones que toman decisiones sobre el sistema de transporte de Santiago. Al principio pensé que las autoridades eventualmente se harían cargo de este error (ha sido denunciado previamente), pero eso no ha ocurrido, por lo que procedo a hacer este “reportaje denuncia”.
En el eje Curicó-Tarapacá existe una (muy útil) ciclovía que va desde Vicuña Mackenna hasta el paseo Bulnes. El problema es que, además de las obstrucciones usuales, los ciclistas se trasladan con dificultad por esta vía porque alguna autoridad decidió (arbitrariamente) que, por una sola cuadra, la ciclovía debía ir al otro lado de la calle.
¿Como? …dirán los amables lectores… ¿es posible semejante burla? Pues si lo es, las siguientes fotos lo demuestran.
Al llegar a Serrano la ciclovía desaparece y se cambia al lado norte de la calzada.
Se puede ver incluso que se invirtió en segregar físicamente este trozo de ciclovía que nadie usa
Posteriormente la ciclovía continúa por su lado original
Todo este embrollo responde a la necesidad que hay de dar prioridad al viraje a la izquierda de los buses del Transantiago (por Arturo Prat). Seguramente algún funcionario decidió cambiar de lado la ciclovía completa, un segundo funcionario decidió que no había tanta plata y un tercero (haciéndole medio caso al primero y al segundo) envió la orden de ejecutar esto sin siquiera tener un mínimo conocimiento del problema.
Resulta casi jocoso que se haya cambiado de lado la ciclovía… si sólo hubiera desparecido uno entendería que era una (muy mala) solución transitoria al problema del viraje de los buses. Sin embargo el malgasto de recursos en segregar físicamente una ciclovía que nadie usará nos confirma que lo que se dio fue una (muy mala) solución definitiva al problema del viraje de los buses ( y de pasadita se nos confirma que en este país la plata sobra)
No quiero acusar a nadie de hacer mal su trabajo, lo que parece ocurrir es que todos lo hacen pero sin una organización general adecuada. Al ver este nivel de descoordinación en un problema puntual, uno se puede imaginar el nivel de descoordinación que existirá entre, por ejemplo, los distintos ministerios al tratar de sacar adelante un proyecto tan complejo como el Transantiago. Es de esperar que estos problemas (la ciclovía y el Transantiago) se solucionen a pesar de las barreras burocráticas…
Uno espera que las “cabezas” sirvan para "algo más" que rodar cuando se detecta un error....
jueves, julio 12, 2007
La descoordinación en materia de transporte: un ejemplo práctico (y patológico)
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2 comentarios:
Excelente tu anotación. Muy atinada y clara por lo demás.
Lo peor de toda esta solución o mas bien parche, es que la ley lamentablemente obliga al uso de las ciclovías cuando estas existen. Por lo tanto estamos obligados a perder al menos 5 minutos de viaje haciendo una maniobra completamente estúpida en esa cuadra.
Esto confirma que nadie de los que toma decisiones en relación a transporte de bicicleta anda en ella. Son todas decisiones tomadas desde un escritorio.
TODO ES PARA PEOR
bUENO DECIDI, (bájate pepito!) asomarme a la pagina porofezional del Richie
¿El mejor análisis del Transantiago? ¡Los Picantes! Esos cantantes de la pobla
http://www.youtube.com/watch?v=pbBlCWQ4-3Q
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